Estrellas y lises del barroco estellés. (Colección del siglo XVIII del ayuntamiento de Estella-Lizarra)

Estrellas y lises del barroco estellés. (Colección del siglo XVIII del ayuntamiento de Estella-Lizarra)

Estrellas y lises del barroco estellés. (Colección del siglo XVIII del ayuntamiento de Estella-Lizarra). Exposiciones Museo Gustavo de Maeztu

Estrellas y lises del barroco estellés. (Colección del siglo XVIII del ayuntamiento de Estella-Lizarra). Exposiciones Museo Gustavo de Maeztu

A partir del Miércoles día 26 de junio de 2013, el Museo Gustavo de Maeztu de Estella-Lizarra presentará la exposición «ESTRELLAS Y LISES DEL BARROCO ESTELLÉS» (Colección del Siglo XVIII del Ayuntamiento de Estella-Lizarra)

Esta muestra que a partir de este momento podrá contemplarse en el ESPACIO DOS del Museo Gustavo de Maeztu recupera para la contemplación una selecta colección de obras propiedad del Ayuntamiento de Estella-Lizarra, que por su origen y ubicación sólo han podido verse en estancias municipales.

La muestra en total reúne 10 obras de diversos formatos y autores unidas por el nexo común de formar parte de la galería de imágenes pictóricas atesoradas por el Ayuntamiento de Estella-Lizarra a lo largo del Siglo XVIII.

LA EXPOSICIÓN

La muestra es una ocasión especial de poder contemplar en Navarra por primera esta selecta y depurada Colección. El Ayuntamiento de Estella-Lizarra cuenta con un repertorio de obras pictóricas de gran relevancia, ya que la colección municipal cuenta con la galería de retratos reales, la colección de Gustavo de Maeztu y las obras incorporadas mediante las sucesivas ediciones de las bienales de pintura además de otras adquiridas y donadas.

Entre los fondos que posee destaca la interesante Galería de retratos reales, integrada por los retratos de monarcas borbónicos. Su valor radica en que constituye un excepcional conjunto de lienzos barrocos que revelan un programa iconográfico institucional formado tanto por emblemas heráldicos: el escudo de la ciudad, las armas del reino y las de la monarquía hispánica, todos ellos del siglo XVIII, así como una galería de retratos de reyes y reinas de la dinastía Borbónica, correspondientes a los siglos XVIII Y XIX. A esto hay que añadir una pieza singular, la “Inmaculada Concepción” de Miguel Jacinto Meléndez del siglo XVIII, obra muy notable de gran formato. La importancia de esta colección radica tanto en su notable ejecución como en el conjunto que conforman, único en Navarra que aúna escudos con retratos. En Navarra sólo se conservan otras dos galerías de retratos reales, una en el Palacio de Navarra, procedente de la Diputación del reino y la otra en el ayuntamiento de Pamplona. El conjunto estellés procede del antiguo ayuntamiento de la ciudad, en cuya sala capitular colgaba como elemento parlante de pertenencia al Reino.

Dada la importancia e interés que tiene esta Colección se ha estimado conveniente ofrecerla a todos los públicos en un especial ambiente y escenario, adecuándose de esta manera el ESPACIO DOS del Museo Gustavo de Maeztu para contemplar la selección de piezas destinadas a su exposición permanente en el citado Museo. De esta manera, un total de 10 obras han sido articuladas, exhibidas y estudiadas en profundidad para ofrecer un itinerario artístico e histórico de notable interés que permite redescubrir unas obras que a partir de ahora prácticamente en su totalidad están datadas y signadas con autores de importancia contrastada.

Tres son los nombres de pintores del Siglo XVIII que se imponen al hilo de los diferentes trabajos pictóricos ofrecidos en esta muestra permanente:

PEDRO ANTONIO DE RADA

Pintor riojano nacido en Calahorra, residió algún tiempo en la capital alavesa, Vitoria, pero pronto se traslada a Pamplona. Muere en la capital Navarra en 1768.

Comenzó realizando varias obras en la capilla de San Fermín entre 1736 y 1737. Con su firma figuran pinturas como la de la iglesia de Los Arcos, Navarra. Entre las diferentes tasaciones ejecutadas por él podemos citar la obra del retablo mayor de Mendigorria, hacia 1748. Llevó a cabo algunas labores encargadas por el prelado Miranda, tales como unos cuadros para la capilla del palacio episcopal que representaban a diferentes santos, entre ellos San Ildefonso, San Francisco de Sales y San Saturnino. De igual modo entre los años 1748-1749 doró el altar de dicha estancia y, por orden del mismo religioso, ornamentó y revistió el oratorio de la parroquia de Santiago de Calahorra, en especial el retablo de San Gregorio Ostiense. En 1756 pintó un cuadro de San Fermín en su capilla y baldaquino, que actualmente puede admirarse en el Ayuntamiento de Pamplona y que destaca por su interés histórico. Hacia 1760 se encargó de otros dorados y pinturas para San José de Mendigorria y la parroquia de Miranda de Arga. Este mismo año se trasladó a Heredia, Álava, con el fin de comenzar el dorado del retablo mayor de la parroquia de San Cristóbal, en colaboración con Santiago de Zuazo, vecino de Los Arcos, Navarra.

En años posteriores, además de continuar con los trabajos en distintos altares navarros realizó en 1762 el conjunto de lienzos de la sacristía de la Catedral de Pamplona. No pudo finalizar la obra de policromía de la sacristía de Santa María de Viana.

MIGUEL JACINTO MELÉNDEZ

Oviedo, 1679 – Madrid, 25 de agosto de 1734.

Decano de la familia de pintores con este apellido, se formó en Madrid, en el taller de José García Hidalgo, que fue discípulo de Carreño de Miranda hacia 1672-73. Es posible que su formación se realizase en la Academia del Conde de Buenavista. La primera parte de su trayectoria artística se centra en la pintura de los retratos reales de la nueva dinastía. La pintura de retratos reales era, en los años que siguieron a la Guerra de Sucesión. Meléndez no continua la tradición de los retratos barrocos españoles, austeros, cargados de simbología, ni tampoco conoce al principio los modelos franceses, en los que el barroquismo se traduce por grandeur : grandes gestos, imponentes mantos, apabullantes pelucas. Meléndez pintará retratos reales sencillos, despojados del gran aparato, con unos esquemas compositivos simples. Su acierto, le propicia la obtención por parte de Felipe V del puesto de Pintor del Rey, en 1712 a título honorario, sin sueldo, y después, en 1726, con retribución. Tras la llegada el pintor Jean Ranc a la Corte, Meléndez y sus modelos quedan desbancados. No obstante, sus retratos de nobles españoles ligados estéticamente a la tradición española, especialmente a la escuela madrileña del Siglo XVII, serán muy cotizados. El resto de su obra se centra en composiciones religiosas, en las que repite modelos de Carreño de Miranda y Cerezo, obras en las que destaca la belleza formal y compositiva.

ANTONIO MARTÍNEZ DE ESPINOSA.

Nace en Madrid en 1739, hijo de D. Domingo Martínez profesor de arquitectura. Su formación la realiza de la mano de Pablo Pernicharo, asistiendo a la Real Academia de San Fernando. Se traslada a Roma para proseguir su formación pictórica, en un principio sin pensión logrando posteriormente una ayuda extraordinaria gracias a su buen trabajo. Tras su paso por Córdoba, donde pintó varias obras públicas y particulares, en enero de 1776 ingresa al servicio de uno de los hijos de Carlos III, el Infante don Gabriel de Borbón, con una asignación de mil reales mensuales. Su trayectoria cortesana será larga, como Pintor de Cámara del Infante don Gabriel, de su hijo el Infante don Pedro y finalmente de su hermano Carlos IV.

 

Estamos ante una ocasión única, es la primera vez que puede contemplarse este trabajo singular, la primera vez que este canto de autenticidad, buena pintura y rigor investigador nos permite conocer y disfrutar de piezas notables del patrimonio de Estella-Lizarra y de Navarra, y lo hacemos desde el MUSEO GUSTAVO DE MAEZTU en lo que es un compromiso con el arte auténtico, el arte de los grandes para todos los públicos. Estamos ante una muestra única, que nos remonta al Siglo XVIII, siglo de Las Luces, ofreciéndonos claves de conocimiento y exaltación de los bienes y la historia de la ciudad del Ega.

La exposición ha sido producida para ser contemplada con total reverencia y detalle, el Museo GUSTAVO DE MAEZTU en esta ocasión gracias a la colaboración y la voluntad generosa de los autores de los textos, así como a la económica de Gobierno de Navarra, nos permite contemplar esta muestra excepcional y relevante, que le hace continuar en la línea de producciones de gran calidad dirigidas al público de Navarra y a todo aquel que desee disfrutar con la contemplación de una muestra de indudable contenido pictórico y calidad contrastada.

El Museo Gustavo de Maeztu centra el núcleo de su programación en lo que denominamos el Programa EN DEFENSA DE LA PINTURA, que nos permite acercarnos al arte a través de la especialización de la pintura y todas las técnicas que en torno a ella configuran le creación artística.

RECORRIDO EXPOSITIVO

La muestra sigue un recorrido estético, cronológico y didáctico y está ubicada en el ESPACIO DOS del Museo Gustavo de Maeztu.

PUBLICACIÓN

La exposición va acompañada de la edición de un exquisito catálogo, en el que se fusionan los estudios de los autores: Don José de la Mano, Don Ricardo Fernández Gracia, Doña Camino Paredes y Don Gregorio Díaz Ereño. Además de una extensa y completa bibliografía el catálogo reproduce todas las obras.

HORARIOS Y FECHAS

La exposición «ESTRELLAS Y LISES DEL BARROCO ESTELLÉS» (Colección del Siglo XVIII del Ayuntamiento de Estella-Lizarra) podrá visitarse a partir de Miércoles, día 26 de junio de 2013.

El horario de visita es días laborables, de 9,30 a 13 horas. Sábados, Domingos y Festivos de 11 a 14 horas. Lunes cerrado. La entrada es gratuita.

INAUGURACIÓN.

El acto de PRESENTACIÓN E INAUGURACIÓN tendrá lugar en el MUSEO GUSTAVO DE MAEZTU, el próximo miércoles, día 26 de junio a las 11 horas.